10 de abril de 2011

Principio y fin del Estado de Bienestar

Principio y fin del Estado del bienestar

Tras el éxito de la Revolución que generaron con el alzamiento de 1917”Pan y Rosas”, las mujeres rusas lograron un nivel de reconocimiento laboral jamás visto con anterioridad, y en bastantes ocasiones después. Así en el año 1920 se legalizó el aborto, legislativamente también se posibilitó el divorcio sin juicio, en lo relativo al cuidado de los hijos se construyeron guarderías comunales y la jornada laboral llegó a ser de sólo ¡cinco horas diarias! Y ello considerando el ingente incremento de masa laboral derivado de liberar a la mujer de las cargas de la maternidad. Luego llegó Stalin, pero eso ya es otra historia. Después de esta merecida cita de lo acaecido en el incipiente bando socialista conviene centrar la atención en el área que nos ocupa, que no es otra que occidente, o más concretamente la situación socio laboral de la mujer en el sistema capitalista, y por poner un ejemplo en España el divorcio se aprobó a finales del siglo XX y el aborto aún suscita controversia, pero España es diferente, ya se sabe. La realidad es que poco tiempo después de la Revolución Rusa terminó la Primera Gran Guerra, y la reconstrucción de lo destruido y la falta de mano de obra masculina propiciaron que se mantuviese una forma de producción fordista y taylorista en la que la mujer mantiene el puesto de trabajo que desarrollaba en la guerra, pero bajo unas condiciones precarias y sin, por supuesto, ningún tipo de medida de conciliación de vida laboral y familiar. Si bien es innegable, bajo un punto de vista funcionalista, que los díscolos años 20, la atribución a la mujer una serie de profesiones que le son propias, o dicho de otro modo hay profesiones específicas para mujeres (enfermera, secretaria…).También lo es que el Crack del 29 (en mi opinión la primera crisis global) supone la más absoluta miseria para los sectores más vulnerables, y la hecatombe económica y, en consecuencia, laboral golpea con más crueldad a la mujer, quien además cuenta con cargas mayores.

LA IGUALDAD LABORAL: Breve Crónica Negra de la Lucha por la Igualdad

LA IGUALDAD LABORAL: Breve Crónica Negra de la Lucha por la Igualdad: "Dado que se trata de igualdad de género en el área laboral, nos circunscribiremos al periódo histórico en que propiamente surge: La Indus..."

Principio y Fin del Estado de Bienestar II

Principio y fin del Estado de Bienestar II

Los negros años 30 que sucedieron al Crack del 29 se vivieron de distinto modo a éste y al otro lado del Atlántico. Mientras que en Estados Unidos se atravesó la Gran Depresión (de la que se salió desarrollando la industria armamentística) en Europa surgió el predominio de líderes nacionalistas y fascistas, quienes desarrollaron su potencial bélico (en esto sí coinciden con los yanquis) a fuerza de mano de obra esclava hasta su pura extenuación. Como no podía ser de otro modo, estalló la segunda aberración de la “civilización” occidental; La Segunda Guerra Mundial. De ella Estados Unidos sacó partido, puesto que entró más tarde en el conflicto y durante esos años se afianzó como primera potencia económica mundial, ello propició que se mantuviera una sociología del trabajo fordista en los que la mujer sigue ligada a los roles reproductivos y ,cada vez en aumento, el trabajo remunerado fuera del hogar.
Es después de la Segunda Gran Guerra cuando se puede hablar de Estado de Bienestar en sentido estricto, con todo lo que ello conlleva; es decir, en lo económico métodos keynesianos con intervención del Estado en la regulación de la economía y criterios proteccionistas que impulsaron el desarrollo de sistemas de salud y educación universales…He aquí un choque cultural importante; por un lado la mujer cada vez está mejor preparada y cualificada resultado de la mayor formación que recibe, pero simultáneamente aún está relegada a profesiones consideradas para mujeres. Y por otro se manifiesta el conflicto que ocasiona el acceso al mercado laboral; esto es, el conflicto del roll domestico de la mujer trabajadora, quien además de participar en el trabajo remunerado debe afrontar todas las obligaciones domésticas lo que redunda en una duplicidad de jornadas. Otro vector en auge en esta etapa es el de los movimientos feministas en constante lucha por conquistar derechos de ciudadanía, políticos y laborales para las mujeres. En el apartado reproductivo cabe reseñar la invención de la píldora en 1958, que propicia que la mujer pueda decidir si y cuando quiere ser madre, con efectos directos en el acceso al mercado laboral. Este lento ( o no tan lento) fluir de acontecimientos será el germen de los movimientos que al final de los años 60 y principios de los 70 convulsionaron la cultura occidental y en la cuestión que nos ocupa supusiera la ruptura definitiva con la sociología del trabajo clásica que considera al hombre productor y a la mujer reproductora.
Lamentablemente el fin del Estado de Bienestar esta próximo, y será una mujer quien le ponga fin; me refiero a Margaret Thatcher, pero ese asunto se tratará en una próxima entrada.

José Manuel Mangas Pardo